Según se publicó en abril de 2013, el guardameta mantuvo diversos encuentros con Caroline Lijnen, la que por entonces era novia de su compañero de selección y amigo Kevin de Bruyne. Los dos jugadores habían fraguado una excelente amistad desde que coincidieron en las categorías inferiores de la selección belga. Sin embargo, esto no debió importarle mucho a Caroline que, al parecer, cansada de su vida en Bremen (Alemania), decidió viajar a Madrid, donde presumiblemente inició su romance con Courtois. Sus primeros contactos fueron a través de Facebook y ella le habría enviado algunas imágenes subidas de tono que propiciaron su posterior relación. Una relación que no pudo mantenerse en secreto por mucho tiempo.
De Bruyne confesó que cuando lo descubrió se volvió loco y que fue un gran shock para él. De Bruyne y Caroline rompieron y el triángulo amoroso en el que los dos futbolistas se habían visto envueltos empezó a repercutir en el ambiente del vestuario.
Dos años después del hecho, la cosa parece estar terminada entre todas las partes. El entrenador de la Selección de Bélgica, Marc Wilmots, confesó: “No negamos que han existido problemas internos entre Thibaut Courtois y Kevin De Bruyne. Pero he hablado con ellos y ambos confirman que este tema está zanjado”
Algunos medios aseguran que los dos jugadores mantienen una relación tensa y no se hablan, simplemente se tratan de manera diplomática y son compañeros de profesión, otros medios aseguran que si se hablan y que todo ha quedado en el pasado. Habrá que esperar, el fútbol no está exento de polémicas de este estilo.
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